lunes, 12 de diciembre de 2016

A ti ángel quijotesca...

Oscuridad cae sobre el mundo,
pues tu luz no está presente,
tus dorados cabellos
se han elevado para competir caprichosamente con el sol.

Jugando a las escondidas,
en algún rincón del cielo compartirás
con grandes literatos
y luego la tertulia harás
porque tu pasión por las letras
nunca faltará.

Los mortales sentimos tu ausencia,
tu sonrisa espontánea,
el filo de tu sarcasmo,
el abrazo sincero,
tu amistad desinteresada.

Me mostraste lo que el amor debe ser,
y me dijiste nunca desfallecer,
tú, única e irrepetible
a ti te quiero agradecer.

Entregaste la última gota de tu conocimiento
como sacrificio eterno
y en pequeñas almas vivirás eternamente
así como en lo profundo de mi corazón.